First Team

Nuevo entrenador, misma historia para el United

Como en casi todos los triunfos de Nueva Inglaterra, Shalrie Joseph (izq) fue la figura de los Revs ante D.C.

El debut de Ben Olsen como técnico del D.C. United fue muyparecido a casi todos los partidos de su antecesor, el recientemente despedidoCurt Onalfo: mucha garra y ganas, pero poco fútbol, sobre todo en la parteofensiva.


Por ende, el resultado de este sábado en el Estadio Gillettefrente al Revolution – un triunfo por la cuenta mínima de los dueños de casa –fue el esperado para un equipo que continúa en el fondo de la Conferencia Estey de la MLS en general, con apenas 12 puntos.


Mientras, los de Nueva Inglaterra, que también están lejos de los puestos de clasificación para la Liguilla, lograron un valioso triunfoque les permitió alvanzar las 18 unidades y escalar posiciones en la tabla.


Más que un nuevo entrenador, parece que al United le hacefalta un hombre fuerte en el mediocampo como Shalrie Joseph, la figura delencuentro que manejó los tiempos del ataque local, al mismo tiempo que impusoorden y organización frente a las arremetidas visitantes.


De la mano del joven volante Andy Najar, el elenco capitalinotomó la iniciativa inicial y dio varios avisos sobre la portería de Matt Reis.Sin embargo, ni el argentino Pablo Hernández ni su compañero en la delantera,Chris Pontius, pudieron convertir estas oportunidades en goles.


Con el avance de los minutos, el Revolution tomó el controldel partido y del balón, siempre bajo la conducción de Joseph.


Eso sí, el tanto de la apertura para el equipo de casa atres minutos del descanso llegó de un tiro libre indirecto de Chris Tierny,cuyo servicio al área fue conectado con un gran cabezazo de Pat Phelan, quien anotó su primer gol en la MLS de la mejor forma posible.


Tal como ocurrió en el primer tiempo, fue el United el quepropuso e intentó generar llegadas de peligro durante gran parte delcomplemento. Sin embargo, de poco sirvió este dominio, ya que casi nuncase produjo la jugada que derivara en la oportunidad del empate capitalino. Ycuando sí se presentaron las posibilidades, los visitantes las desaprovecharon,como el remate de Stephen King que pasó rozando el poste izquierdo de Reis, oel cabezazo picado del suplente Adam Cristman que salió por encima deltravesaño.


Mientras, el conjunto local fue fiel al estilo delentrenador Steve Nicol, y esperó atrás para montar contragolpes cuando el rivalse adelantó demasiado. Al final, la mínima bastó para que el Revolution sumaratres puntos de oro y el United siguiera en caída libre en la tabla.Â