WASHINGTON— Puede que el D.C. United se encuentre en el último lugar de la clasificación general de la liga con una nada envidiable marca de 3-12-3, 12pts y apenas doce goles en su contabilidad, pero después del impacto que significó para la plantilla la salida de Curt Onalfo de la dirección técnica y la designación de Ben Olsen para esa posición, pareciera que mejores tiempos están por llegar.
“El objetivo inmediato que le planteamos a Ben (Olsen) es que tenemos que ganar en New England”, dijo el presidente del club Kevin Payne el pasado miércoles al comentar la decisión de la directiva de despedir a Onalfo a mediados de temporada y delegar toda esa responsabilidad en el ex mediocampista.
A simple vista, pareciera que ganar el juego que protagonizarán con el Revolution el sábado 7 a las 7:30pm ET en el Gillette Stadium de Foxboro, Massachussets, no significaría nada para un club que necesita una reacción espectacular en la que gane varios partidos y resurgir a la competencia en busca de la clasificación.
Sin embargo, para los directivos, Olsen, sus jugadores y los aficionados, una victoria ante New England los puede ayudar a reaccionar de una vez por todas y a cambiar la mentalidad y falta de concentración que ha prevalecido en la plantilla en lo que va de temporada, en la que corren el riesgo de quedar fuera de la Liguilla por tercer año consecutivo.
“Hoy en un día para asimilar la partida de Curt (Onalfo) y a partir del jueves nos concentraremos en la preparación física y mental para enfrentar a los Revs”, dijo Olsen el miércoles 4 sobre el partido que marcará su debut como técnico interino.
Además de lo emocional, el triunfo ciertamente colocaría a los capitalinos en una mejor posición dado que New England, junto al Philadelphia Union, marchan de penúltimos en la tabla de la Conferencia Este con 15 puntos, sólo tres más que el D.C. United.
Asimismo, una victoria sobre los Revs, combinada con una derrota del Chicago Fire en su partido del domingo ante los Red Bulls de Nueva York, colocaría al DC a sólo cinco puntos del Fire, club que con 20 unidades ocupa la cuarta casilla que asigna el último cupo a la Liguilla.
Quizás son sólo números pero al fin y al cabo en el fútbol las estadísticas también cuentan a la hora de pronosticar los resultados.
Y si de números se trata, quizás Ben Olsen contará en su primer partido al frente del banquillo principalmente con la capacidad de su compañero de mil batallas en el DC United, el boliviano Jaime Moreno, con quien ha ganado dos títulos de la Liga y jugó a su lado por más de una década, sólo interrumpida cuando Moreno estuvo un año en Nueva York.
“Esperemos que Ben pueda dar esa inyección que nos falta y que el equipo cambie de actitud. Hay que dejar a un lado el dramatismo y seguir adelante porque la vida continúa”, alentó Moreno.
